Vistas al mar que cautivan

Las vistas desde la habitación eran impresionantes, rodeadas de naturaleza y tranquilidad. El restaurante ofrece platos deliciosos, y el trato del personal te hace sentir como en casa. Ariel, uno de los propietarios, se destacó por su amabilidad y cercanía.

Aunque la llegada al hotel puede ser un poco confusa y parece estar apartado, lo que podría desanimar a algunos, una vez allí, la experiencia supera cualquier dificultad inicial.

El desayuno fue espectacular, con una variedad de opciones que incluían productos locales frescos y un café delicioso.

El baño de nuestra habitación tenía un olor desagradable, lo que afectó nuestra experiencia.

La habitación era amplia y teníamos unas vistas al mar para envidiar. Además, el lugar tiene un jardín encantador donde relajarse un rato entre día y día.

Cuidado con los jabalíes, no son tan amigables como creen.

Aquí va mi experiencia, sin filtros

Pasé dos días en un hotel encantador. La playa está a un corto paseo, y la atención de Tomer fue excepcional. En una caminata larga, me ofreció llevarme y cocinar algo delicioso. La renovación del lugar es impresionante. Sin duda, un lugar ideal para desconectar y disfrutar de la naturaleza.

limpieza impecable, cocina sorprendente, vistas estimulantes

La llegada al hotel es confusa, parece que se van a un lugar remoto. Además, no hay mucho que hacer en los alrededores. Tener más opciones de actividades sería ideal!!!

Habitación cómoda, vistas espectaculares y atención excepcional de los propietarios. Desayuno delicioso con aguacate y huevo frito. Paseos cerca de la playa y un ambiente acogedor. Ideal para desconectar en pareja.

exploraciones fascinantes cerca de la playa y parques hermosos

Disfruté de unas maravillosas caminatas por la zona, con el mirador de San Roque a solo 5.5 km, ofreciendo vistas increíbles, y la Plaza Maior, a aproximadamente 6.5 km, que es perfecta para sumergirse en la cultura local. el hotel también proporciona un ambiente acogedor, ideal para parejas y familias que buscan una escapada revitalizante. sin embargo, la llegada al hotel puede ser confusa a veces.

Pasamos 1 noche en una habitación doble con baño privado. La comida fue increíble, especialmente el solomillo. Las vistas eran espectaculares y me encantó la atención personalizada del dueño. Nos sentimos muy cómodos durante nuestra estancia.

Las vistas desde la habitación eran espectaculares y la atención de Ariel fue super cercana. La limpieza era impecable y el desayuno, una delicia! Cada rincón del lugar te hacía sentir en paz con la naturaleza.

No tiene que mejorar nada.

La cama era muy cómoda y la atención del personal fue excelente. Sin embargo, el baño tenía un olor desagradable.

Durante mi estancia, noté que faltaban perchas en el armario, lo cual podría mejorar. Sin embargo, la habitación estaba muy limpia y era cómoda. Me pareció que la bañera era algo pequeña, pero en general, el ambiente era acogedor. Un buen lugar para una escapada corta en pareja o familia.

Todo perfecto, cumple su función. La ubicación es ideal, con una hermosa playa a un corto paseo y restaurantes cercanos maravillosos.